Será porque escribía con tinta azul.
O será porque escribía sobre el mar.
O será porque hay tantas cosas inexplicables.
Primero fue el olor, húmedo,
a salitre, algas, peces,
que se adhería a su piel como un vestido ceñido.
a salitre, algas, peces,
que se adhería a su piel como un vestido ceñido.
Luego respiró a bocanadas un aire nuevo:
le supo a horizonte.
le supo a horizonte.
Los papeles flotaron, fueron islas.
Todo lo demás, agua,
infinita, abismal agua.
infinita, abismal agua.
Y ella,
repentinamente,
navegante,
pez,
irremisiblemente,
sirena.
repentinamente,
navegante,
pez,
irremisiblemente,
sirena.
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